LA ENSEÑANZA DE LA CIENCIA MILITAR
Ciencias y enseñanza son inseparables. En primer lugar, hay que precisar que la ciencia militar es una, es singular, no es plural. No se puede hablar de ciencias militares, porque ello desvirtuaría el concepto. La ciencia militar es una que, por cierto, puede requerir de otras ciencias, lo cual resulta normal, porque otras ciencias también precisan de las demás; verbigracia, el requerimiento de la matemática, la física, la biología, etc.
Ahora bien, tratándose de la enseñanza de la ciencia militar, imprescindible previamente estudiar y empaparse de lo que podría llamarse historia de la epistemología de la pedagogía militar; en otras palabras, habrá que responder a esas preguntas: ¿qué ciencia emplean las escuelas militares para formar y capacitar a sus alumnos?, ¿qué ciencia utilizan los profesores o instructores en su enseñanza? Y ¿por qué se tiene que saber que la enseñanza es la practica o aplicación de una ciencia que es la pedagogía?.
La pedagogía produce la ciencia de la educación, y la educación es la practica o el desarrollo de esa ciencia. Con esto demuestra que quien no conozca la ciencia y la técnica educativa difícilmente podrá desarrollar una labor positiva.
En consecuencia, en todas las escuelas militares y también en todas las universidades y escuelas, quienes enseñen cualquier asignatura, deben conocer o estudiar la historia epistemológica de la pedagogía superior, porque ello permitiría esclarecer y superar los resabios de una metodología formalista y fuera de moda.
Enseñar de espaldas al alumnado ya no se estila; eso es cosa del pasado; ahora la enseñanza es dinámica, es intercambio de ideas, es debate en cada sesión o clase.